Veracrypt: Cifrar para cuidar la seguridad de nuestros archivos y discos duros

Imatge
Àmbits de Treball

Hoy en día el alma­ce­na­mi­ento de datos en algún dispo­si­tivo elec­tró­nico es normal, casi tan normal como lo fue en el pasado tener una agenda papel, o un archi­vero. Si una docu­men­ta­ción era sensi­ble era alma­ce­nada en un lugar seguro, ya sea docu­men­ta­ción de una empresa u orga­nismo o nues­tra docu­men­ta­ción de un banco, o fotos fami­li­a­res, etcé­tera. En la era digi­tal el concepto es el mismo: los datos que son priva­dos o sensi­bles los alma­ce­na­mos ya sea en un disco duro de nues­tra compu­ta­dora, o en un USB u otro tipo de alma­ce­na­mi­ento externo. Ya hemos visto la impor­tan­cia de alma­ce­nar datos sensi­bles en una nube, lo mismo pasa con alma­ce­na­mi­ento físico.

Es impor­tante que usemos herra­mi­en­tas que permi­tan que esos dispo­si­ti­vos sean segu­ros, ya sea por si nos son sustra­í­dos, incau­tado por una fuerza pública, o robado para uso de terce­ros. La encrip­ta­ción es para este propó­sito, un proceso por el cual se cifra un mensaje (en este caso un archivo, o los datos conte­ni­dos en él) utili­zando un algo­ritmo de cifrado con cierta clave para trans­for­mar un mensaje, para que sea ilegi­ble para toda persona que no tenga la clave de desci­frado.

Veracrypt es una herra­mi­enta multi-plata­forma, de código abierto, que cifra y protege nues­tros archi­vos, contra ataques o acci­den­tes, como los descri­tos antes, creando volú me­nes cifra­dos para alma­ce­nar nues­tra infor­ma­ción sensi­ble en dispo­si­ti­vos.

Prin­ci­pa­les opci­o­nes que nos ofrece Veracrypt:

  • Crea un disco virtual encrip­tado dentro de un archivo y lo monta como un disco real.
  • Cifra una parti­ción completa o un dispo­si­tivo de alma­ce­na­mi­ento, como una unidad USB o un disco duro.
  • Cifra una parti­ción o unidad donde está insta­lado nues­tro sistema Opera­tivo.
  • El cifrado es automá­ticoen tiempo real (sobre la marcha) y trans­pa­rente.
  • Propor­ci­ona una nega­ción plau­si­ble, en caso de que un adver­sa­rio le obli­gue a reve­lar la contra­seña: volu­men ocultosistema opera­tivo oculto.

Descar­gar e insta­lar VeraCrypt

Para descar­gar Veracrypt vamos a ingre­sar a https://www.veracrypt.fr/en/Down­lo­ads.html, donde apare­cerán dife­ren­tes opci­o­nes en función de nues­tros Sistema Opera­tivo. Descar­ga­mos la que corres­ponde a nues­tro sistema.

Veracrypt puede descar­garse en una versión Insta­ller para cifrar discos en nues­tra compu­ta­dora o en una versión Porta­ble, para tras­la­dar el programa en una memo­ria USB y utili­zarla donde lo nece­si­te­mos.

Al comen­zar a usar Veracrypt, nos dará varias opci­o­nes. Vamos a ir a la opción Crear Volu­men.

En el asis­tente, pode­mos elegir entre cifrar una parti­ción del sistema, una unidad de disco completa (por ejem­plo un USB), o crear un conte­ne­dor (algo como una caja, o una carpeta) de archi­vos cifrado.

Ésta segunda es la que te reco­men­da­mos para empe­zar a usar Veracrypt de manera senci­lla. Y luego ir probando otras opci­o­nes mas avan­za­das de encrip­ta­ción.

Al crear un conte­ne­dor, nos pregun­tará la ubica­ción donde quere­mos crearlo, el tamaño máximo del conte­ne­dor (por ejem­plo, 2GB), y algu­nas opci­o­nes de cifrado (deja­re­mos las que pone el asis­tente por defecto). Elegi­re­mos también el formato de fiche­ros (NTFS), y por último pulsa­re­mos en Forma­tear para termi­nar de crearlo.

Un conte­ne­dor de archi­vos cifrado se verá como un archivo dentro de nues­tro disco, pero al desci­frarlo desde Veracrypt con nues­tra contra­seña, se compor­tará como un Disco nuevo en nues­tro sistema, y pode­mos copiar y mover archi­vos dentro de él.

Con Veracrypt también pode­mos crear un volu­men oculto, una opción bastante útil si por la fuerza tene­mos que entre­gar nues­tra contra­seña de cifrado (medi­ante extor­sión, por ejem­plo). Si tene­mos un volu­men oculto pode­mos dar la contra­seña del primer volu­men, que contendrá el volu­men oculto a su vez, pero que al estar oculto no podrá ser detec­tado por quié­nes acce­dan a nues­tra contra­seña. Así pode­mos tener dife­ren­tes nive­les de cifrado según la sensi­bi­li­dad de cada dato.

Imagen de portada reali­zada por la Ilus­tra­dora Elena Romero.